domingo, 22 de enero de 2017

La belleza de un círculo imperfecto






Viendo la película de ciencia-ficción Arrival (La llegada), me llamó la atención el lenguaje escrito de los visitantes del otro mundo: unos caracteres dibujados en el aire, parecidos a trazos circulares de humo líquido. Le encontré un parecido con la caligrafía japonesa, el Shodō (書道), "el camino de la escritura"). Este dato me llevó directamente al Hitsuzendō, el camino del pincel, o caligrafía zen.
Arrival,Denis Villeneuve (2016) 

Ensō (円相) significa círculo en idioma japonés. No es una palabra sino un concepto. Es también un sagrado símbolo en la escuela Zen del budismo. Los monjes budistas trazan estos círculos en papel de arroz o seda, una verdadera demostración del momento presente, una sola línea de tinta que expresa la absoluta iluminación del aquí y ahora, la fuerza y la elegancia, el universo y el vacío, cuando la mente en equilibrio permite que el cuerpo/espíritu (en un Todo completo) pueda actuar. Es el estado Ki-Ken-Tai de la práctica de Kendo, el instante cuando la fuerza, la espada y el cuerpo/espíritu se unifican en un solo movimiento. El trabajo de la mano al mover el pincel también es semejante al que hace la muñeca al mover el shinai, lo que otorga una especial estética tanto al trazo de tinta como al golpe de Kendo. Los budistas zen dicen «que el carácter del artista está totalmente expuesto en su manera de realizar un ensō. Sólo una persona que es mental y espiritualmente completa puede plasmar un auténtico ensō. Algunos artistas practicarán dibujando un ensō cada día a modo de ejercicio espiritual». Práctica, práctica, práctica. No parece haber otro camino.



Sin embargo, no siempre lo que se busca es la perfección.  El Fukinsei (不均斉), la negación de lo perfecto. es el principio que permite el balance a través de la asimetría. Es por eso que lo trazado no puede modificarse (principio filosófico que se adopta en Kendo, puesto que cada golpe y ataque es sincero y de total entrega). Acorde a este principio de no-perfección, algunos artistas trazan un círculo abierto, expresando la idea de que el Ensō no es algo en sí mismo sino parte de un todo más grande y que lo irregular es inherente a la existencia, y que por lo tanto debe aceptarse. Equilibrio, balance. Una idea difícil de poner en acción en la práctica diaria de Kendo cuando uno tiene como motor esa idea tan occidental de lo que es la Perfección. Para profundizar más sobre esta idea, en un próximo post voy a necesitar entonces hablar sobre los principios de estética japonesa, sobre todo de Yohaku no bi (余白の美), relacionanado con la idea de ku (vacío) y mu (la nada). Para estar sintonizados con este concepto, debería decirlo en una sola palabra: minimalismo. Es lo que siempre nos dice Sensei en el Dojo: "menor cantidad de movimientos para ejecutar un golpe es igual a más rapidez y más elegancia."










No hay comentarios:

Publicar un comentario